sábado, 22 de octubre de 2011

Si antes hablo...

Si antes hablo...
Pues resulta que el obispo ha visitado Nódalo. Se ve que fue ayer por la tarde. Después de haber estado por Fuentelaldea y Nafría llegó al pueblo de visita pastoral. Celebró misa y visitó el cementerio. Su vírtud, la campechanía.

Allá se juntaron sin prisas, entre los del lugar y los limítrofes, una treintena de personas que acabaron como es menester con un buen ágape de confraternización. Según me han contado sobró de todo, aunque alguien se dejó la herramienta, ésa de quita y pon, en casa.

Se echó de menos a representantes del antiguo gobierno del Ayuntamiento.

martes, 18 de octubre de 2011

Sin noticias de....


No me llegan apenas noticias del lugar. Sé que no hace mucho confraternizaron con un vecino de Nafría y que con la excusa de ver lo bien que iba un horno, creo que de barro, se metieron los chavales y chavalas un cordero entre pecho y espalda. Me he enterado también que hubo significativas bajas a la invitación al evento provocadas por situaciones, algunas, lejanas en el tiempo, pero concatenadas. Ya sabéis aquello de pocos y ...

Y a falta de noticias frescas me viene ahora a la memoria algo de lo que no os había hablado antes. Me refiero a muchos de los comentarios vertidos este verano acerca del dinero que invirtió el pueblo en el arreglo de la iglesia y su nuevo mobiliario. Sabemos lo que significa la iglesia para un pueblo como el nuestro. Es un lugar de recogimiento, de reunión, de encuentro, de recuerdo de muchas fechas, unas mágicas y otras para olvidar. Y es que está muy bien el poder presumir de cómo la han dejado. Pero, y ahí van las críticas escuchadas, al ser un bien patrimonial del obispado debería haber sido él quien hubiera soportado el peso de los gastos ocasionados. El pueblo en todo caso contribuir.
Sabemos que también se necesitan otras cosas y resulta que este año se han quedado las arcas llenas, pero de telarañas, que no han dado ni para la paellada popular. Hemos pasado del todo a la nada en un santiamén. ¡Qué me lo expliquen!. Que como sigamos así vamos a ser los reyes de los sorteos, pero subvencionados por nosotros mismos.
No sólo de lo espiritual vivimos los de Nódalo.

Por otro lado, al menos el cura nos lo agradeció publicamente el día de la fiesta en el sermón, a falta de un agradecimiento personal del propio Obispo.

No quisiera herir sensibilidades pero ahí queda la realidad y alguien tenía que contarla.